lunes, 15 de enero de 2018

Europa nos salva...o nos axfisia?

"Es imposible que algo sea y no sea al mismo tiempo y en el mismo sentido" (Principio de no contradicción). Supongo que, para la mayoría de los mortales, se trata de un principio sensato que tratamos de aplicar en nuestra vida cotidiana.

¿Es aplicable este principio también a Europa?

Aquí ya es más difícil responder. A veces nuestros sentimientos  hacia la Unión Europea son contradictorios: En ocasiones, sobre todo cuando las cosas van bien, la vemos como madre. Pero otras, sobre todo a partir de la crisis,  la vemos como madrastra. La UE unas veces nos rescata, otras parece que nos olvida y nos hunde en la miseria.

Esta ambivalencia europea no es monopolio del hombre de la calle. También es posible localizarla, por ejemplo, en alguno de nuestros ilustres académicos. Hace unos días las redes sociales difundían con entusiasmo un artículo de Javier Marías titulado "El último bastión" en el que, entre otras cosas, se decía:


    Ingreso de Javier Marías en la Academia (27-4-2008) (Foto de El País)


Algo tendrá de buena y envidiable esa Unión cuando, si se fijan, hoy la ataca o la quiere debilitar casi todo el mundo. Trump...Putin...los yihadistas...la Venezuela de Maduro...Le Pen...las extremas derechas holandesa, escandinava, alemana...la extrema izquierda...los independentistas catalanes...


Estoy convencido de que el día en que Javier Marías escribió este artículo se había levantado con el pie derecho.  Hace ahora justamente un año debió en cambio levantarse con el pie izquierdo y publicó "No nos axfisien" en el que sostiene todo lo contrario:

En Europa tenemos en Bruselas a una monstruosa legión de burócratas que viven de eso, de urdir normas y dificultades sin fin, que oprimen a los ciudadanos y no les dejan vivir. De alguna manera han de justificar su sueldo. He aquí mi propuesta y mi ruego: "Señores burócratas de Bruselas y España: No se preocupen por sus empleos. los tienen asegurados. Seguiremos pagándoles de buen grado aunque se pasen la jornada mano sobre mano. por favor, hagánlo. Jueguen al ajedrez, al dominó, a los naipes o con el smartphone. Vean estúpidos vídeos de   en horas laborales...Pero se lo suplico, estense quietos. No piensen...no nos axfisien..."

En qué quedamos? Europa nos salva...o nos axfisia?














6 comentarios:

  1. Pues eso, como todo, depende del momento y del cristal con que se mire. Pero la burrocacia es un lastre, eso está claro. Y lo de salvar...no es de fiar. Me salvaría de la estafa llamada crisis, si la tratara como es: un delito de estafa en toda regla donde se conocen los beneficiarios y se sabe donde están los beneficios y sin embargo....Llegaremos a la siguiente y la seguirán llamando "crisis" y cagandola en lo mismo. Eso; burocracia e ineficacia.

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  2. Hola Carlos: Como me sigues desde hace tiempo ya conoces mi actitud hacia la UE: Creo que hay que seguir avanzando y me parece imprescindible una actitud crítica. Máxime después de la crisis o como te gusta decir, estafa. En esto de Europa no se puede ser ni un meapilas (hay muchos) ni un eurófobo.
    Lo que no se puede es ver, según tu estado de humor, las cosas hoy de una manera y mañana de otra. Sobre todo si eres un escritor cuya opinión va a tener mucho peso en sus lectores. No se puede escribir un día que Europa es el último bastión y otro pedir que Europa no nos axfisie.
    La crítica a la burocracia de Bruselas es un tópico fuera de lugar. Los que han estudiado el asunto saben que el número de funcionarios europeos es menor que el de una ciudad como París. Se trata de un cuerpo de funcionarios superprofesional y muy eficaz. Creo que lo escrito por Javier Marías es injusto y que merece una réplica de los propios funcionarios europeos.

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  3. Tu introducción aclara bastante lo que luego dices (o dice el amigo Marías). Yo, no puedo negarlo, a veces soy europeista defensor y otras deprimido. No puedo evitarlo. Un abrazo desde Birmania.

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  4. Bueno Blas, ya imagino lo "lejos" que te quedará ( o lo absurdo que te parecerá) esta pincelada, esta minucia vista desde Birmania. Pero no sabes lo que se agradece en tales circunstancias tu comentario.
    Ya decía en mi respuesta a Carlos que en esto de Europa hay mucho meapilas (cuyo eslogan podría ser "estamos en la mejor de las europas posibles"). Yo creo que hay que mantener una posición crítica hacia la UE. Eso evita que un día veamos a Europa por las nubes y otros que nos parezca un infierno.
    Un abrazo!

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  5. Hola, amigo Emilio! Bueno, del Sr. Marias ya se sabe...Le gusta estar en el candelero, como sea y a cualquier precio a no ser que se le olvidara en la emcion del momento de puntualizar, de matizar,
    su sacrosanto pensamiento.
    ?Era a LA UNION, a la UNION DE TODOS LOS EUROPEOS, el puro concepto de UNION, lo que calificaba de "ultimo bastion"?
    Si es asi estoy de acuerdo.La UNION de los debiles frente a los prepotentes siempre dio buenos resultados.

    En cuanto a la burocracia, necesaria para canalizar y dotar de mayor efectividad al fenomeno unitario, pienso que tiene tendencia en todas las esferas al perfeccionismo y discusion sobre el sexo de los angeles...
    Son necesarios, controlables y perfectibles y no pueden ser metidos, todos, en el mismo saco.

    Sr. Marias, reportese! Que la cosa no va de llamaradas de emociones, aunque sean vehiculo de articulos periodisticos.

    Es que el amor-odio nos confunde!
    Un abrazo

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  6. Hola Igoa! No sigo mucho a Marías y, por tanto, no soy experto en su personalidad o su manera de ser, pero a raíz de estos artículos que comentamos, sí he podido leer sobre algunas de sus polémicas: con Jorge Herralde; con Gracia Querejeta; con Juan Manuel de Prada; con la Asociación de Víctimas del Terrorismo...
    En el País Semanal, que es donde publica estos artículos, tiene tantos devotos como detractores. Yo los leo de vez en cuando y, a la mayoría, no les encuentro el chiste.
    Cuando habla de Unión no se refiere a la de los débiles frente a los prepotentes. Se refiere a la Unión Europea como institución.
    En cuanto a los funcionarios, los habrá mejores y peores. Pero lo que no me gusta es que algunos los conviertan en un blanco demasiado fácil, en el chivo expiatorio. Eso es más propio de Le Pen o de AfD.
    Un abrazo!

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